Consejos para trabajar con personas que consumen drogas, en la era de la pandemia y más allá
El COVID-19 ha provocado, sin duda, grandes pérdidas y un tremendo cambio social, y con ello, quizás, alguna oportunidad. Cuando los sistemas de salud se han visto al borde del abismo y las cadenas de suministro se han visto interrumpidas, la gente se ha visto incapaz de acceder a los servicios esenciales durante largos periodos de tiempo. Las personas que consumen drogas (PWUD) han sido especialmente vulnerables a estas interrupciones, ya que los servicios tradicionales de jeringuillas y los programas de reducción de daños han girado rápidamente para minimizar la interacción de persona a persona sin dejar de prestar servicios que salvan vidas. Ahora es el momento de aprovechar todo lo que hemos aprendido durante el COVID-19 para planificar y preparar eficazmente las futuras crisis de salud pública y seguir abogando por la tan necesaria flexibilidad en la prestación de servicios para las PWUD.
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